¿Qué es el ‘sistema de sentido’?
En los últimos años, se ha desarrollado un concepto conocido como el sistema de sentido, una idea que se basa en la creencia de que los humanos y la naturaleza pueden cooperar para preservar y mantener la salud de los ecosistemas. El sistema está basado en la idea de que los seres humanos pueden trabajar conjuntamente para restaurar la función natural y el flujo de energía de los ríos. Uno de los principales impulsores de este concepto es que los procesos ecologicos como la formación de hábitats, la polinización, el establecimiento de nutrientes y la estabilización del clima todos dependen de los esfuerzos mutuos de los humanos y la naturaleza.
¿Cuál es el problema?
Uno de los problemas más grandes con el sistema de sentido es que no se ha sido capaz de implementar con éxito. Hasta ahora, parece ser que las iniciativas destinadas a restaurar la función natural de los ríos han fracasado. Esto se debe a varias razones, incluyendo el hecho de que muchos gobiernos y empresas no han tomado medidas para reconocer y abordar el problema. Muchos grupos de defensa ambiental también han apuntado a la falta de recursos financieros para implementar estrategias efectivas, así como la existencia de barreras legales.
¿Qué hay detrás de los fracasos?
Uno de los principales factores detrás de los fracasos en materia de restauración ambiental es la falta de recursos financieros. Muchos países carecen de los recursos necesarios para permitir una aplicación completa del sistema de sentido. Esto significa que las organizaciones, los gobiernos y las empresas se ven obligados a recurrir a soluciones provisionales, como la restauración de los ríos a niveles anteriores a la industrialización o la limpieza de la vertido y la basura. Estas soluciones son solamente temporales y no se consideran un verdadero paso hacia una restauración ambiental completa.
¿Existen otras barreras?
Otro factor detrás del fracaso del sistema de sentido es la existencia de barreras legales. Muchos países han creado leyes que impiden la recuperación natural de ríos y otros ecosistemas. Esto significa que cualquier intento de restaurar el flujo natural de nutrientes y energía de los ríos se ve obstaculizado por la legislación. Esto es especialmente verdadero en los países en desarrollo, donde la reglamentación ambiental y la vigilancia no son de primera clase.
¿Cómo avanzar hacia el éxito?
Aunque parece que el sistema de sentido ha experimentado fracasos numerosos hasta ahora, aún existen esperanzas para el futuro. Si los gobiernos, las empresas y los grupos de defensa ambiental colaboran para abordar los problemas y desafíos mencionados anteriormente, entonces el sistema de sentido podría ser una realidad. Las inversiones en tecnologías verdes, como la regeneración de los suelos naturales y la reutilización de agua, deben ser una prioridad. Estas medidas garantizarán que los ecosistemas fluyan con normalidad, lo que permite a los seres humanos y la naturaleza coexistir en armonía.
Conclusion
El sistema de sentido ofrece una oportunidad única para que los humanos y la naturaleza cooperan para restaurar los ecosistemas de los ríos. Los fracasos hasta ahora han sido atribuidos a la falta de recursos financieros, así como la existencia de barreras legales. Si los gobiernos, las empresas y los grupos de defensa ambiental trabajan juntos para abordar estos desafíos, entonces el sistema de sentido podría ser una realidad. Las inversiones en tecnologías verdes también son fundamentales para alcanzar el éxito.